El contacto físico es una necesidad fundamental para todos los mamíferos. El psicólogo Harry Harlow descubrió esto en sus estudios de referencia con monos. También es casi universal que el afecto físico, en grandes y pequeños, es parte de las relaciones íntimas. El contacto piel con piel es una necesidad real. Se tiene la expectativa de que esa necesidad física será satisfecha en una relación. Sin embargo, la duración y la frecuencia del contacto físico deseado varía con cada persona, y no existe una cantidad normal de afecto físico a nivel universal. Todo el mundo es diferente. El miedo al contacto físico es común entre los sobrevivientes de abuso, incluso si son mayores y están con alguien que les da seguridad, es relativamente común que el contacto físico instigue recuerdos de abuso, especialmente si el tacto o el lugar son similares. La aversión al tacto es una faceta del autismo, pero el diagnóstico se presentaría con otros elementos, incluyendo cosas como una incapacidad para mantener el contacto visual, un sentido del humor que le parece extraño a los demás, y una incapacidad para interpretar las emociones. ¿Te impide participar y disfrutar de la vida diaria? La prevención es la principal defensa contra la ansiedad. Si tu rutina consiste en evitar cualquier tipo de contacto físico, tal vez necesites ver a un profesional. No a menos que tengas un trauma por el contacto físico, no a menos que te enojes muchísimo cuando alguien te toca, no a menos que el contacto te cause un dolor psicógeno. Lo más probable es que tu amigo y su novia sólo necesiten hablar y establecer una cantidad de tiempo apropiada para acurrucarse. Creo que no hay diagnóstico, sólo necesitan tener una conversación sobre los límites. Tal vez podrían acordar un momento y lugar adecuado para cucharearse. A lo mejor cuando estén viendo una serie o una película, está bien, pero cuando estás viendo un partido, quieres que te dejen solo. No es la parte divertida de una relación, pero se necesita de una discusión abierta para que no haya enojos. A menos que tenga otras señales de estrés post-traumático, o que evite el contacto físico de manera obsesiva, probablemente no tiene un problema psicológico. Pero a lo mejor sí tiene que tener una conversación seria con su novia para llegar a un acuerdo.