Si el objetivo principal de tu entrenamiento es mejorar la resistencia, correr es uno de los mejores ejercicios que puedes hacer.
Tanto si eres un principiante que quiere correr 5 kilómetros seguidos por primera vez, como si ya tienes experiencia y te entrenas para tu primera media maratón, la clave para mejorar la resistencia corriendo es la regularidad.
No hay atajos.
Tienes que correr varias veces a la semana durante muchas semanas para mejorar tu condición física y tu resistencia.
Se dice que hacen falta entre diez días y cuatro semanas para notar los efectos de correr y que, para aumentar la resistencia, es mejor olvidarse de las carreras rápidas e intensas y centrarse en carreras más largas y constantes.
La forma más eficaz de mejorar la resistencia corriendo es entrenar con carreras largas y fáciles que te permitan aumentar la resistencia y disminuir el riesgo de lesiones.
Cuando entrenes deberías correr al 80 % de la velocidad a la que competirás.
Por ejemplo, si corres una media maratón a un ritmo de cinco minutos por kilómetro, cuando entrenes deberías cubrir cada kilómetro en algo más de seis minutos.
(Calcula el 80 % de tu ritmo multiplicando el tiempo por 1,25).
Si corres tres veces a la semana, debes asegurarte de sacar el máximo partido a cada carrera.
Para mejorar la resistencia, te recomendamos combinar una carrera larga con dos carreras continuas.
La carrera larga debería ser el 50 % de tu distancia de carrera semanal, mientras que las carreras continuas son más cortas, pero a un ritmo mayor.
Correr erguido te permitirá correr de forma más eficiente y, por tanto, recorrer más distancia con menos esfuerzo.