Disparar en vacío es algo que normalmente no se hace, ya que puede tener consecuencias negativas en los componentes internos de un arma.
Este impacto brusco, de metal contra metal, incluso en armas con percutor y muelle delantero de recuperación como una sistema 1911, de repetirse reiteradamente ese martilleo, acabarán deteriorando ambos elementos, aguja y alojamiento, hasta que uno de los dos ceda.
Cierto que las armas no se diseñan para disparar en vacío, salvo excepciones contadas, como algunas armas de competición con dispositivos para disparar en vacío y entrenar sin fuego, pero en ese caso no se lanza la aguja percutora, solo actúa el disparador.
He visto las suficientes agujas partidas, dobladas o chafadas, y más de un oído agrandado o perforado, para saber que es cierto.