El antimarketing selectivo es una estrategia que consiste en dirigir mensajes de desincentivo o crítica hacia un producto, servicio o marca específica en lugar de promocionar la propia.
A diferencia del antimarketing convencional, que puede centrarse en aspectos negativos de una categoría de productos en general, el antimarketing selectivo se enfoca en señalar las deficiencias, problemas o desventajas de una marca o producto en particular.
Esta estrategia puede ser utilizada por competidores directos o por individuos, grupos o organizaciones que deseen destacar las debilidades percibidas de una marca específica con el objetivo de afectar su reputación, disminuir su participación en el mercado o influir en las decisiones de compra de los consumidores.
El antimarketing selectivo puede tomar varias formas, todas dirigidas a señalar las deficiencias, problemas o desventajas de una marca, producto o servicio específico.
Campañas publicitarias negativas: Consisten en crear anuncios publicitarios que critican abiertamente a una marca competidora.
Estos anuncios pueden resaltar las debilidades del producto o servicio del competidor o comparar directamente los beneficios de la marca propia con las deficiencias percibidas de la competencia.
Campañas en redes sociales: Se trata de utilizar plataformas de redes sociales para difundir mensajes críticos sobre una marca específica.
Esto puede incluir publicaciones, tweets, videos o memes que resalten los aspectos negativos de la marca objetivo y expongan sus problemas o prácticas cuestionables.
Reseñas negativas: Se refiere a dejar comentarios o reseñas negativas en línea sobre productos o servicios de la marca competidora.
Estas reseñas pueden influir en la percepción de los consumidores y afectar la reputación de la marca objetivo.
Campañas de boicot: Consisten en organizar o participar en campañas destinadas a boicotear productos o servicios de una marca específica en respuesta a sus prácticas comerciales, políticas o éticas.
Los boicots pueden tener un impacto significativo en la reputación y las ventas de la marca objetivo.
Informes de investigación o estudios: Implican la divulgación de informes de investigación, estudios o investigaciones que exponen problemas o deficiencias en los productos, servicios o prácticas comerciales de una marca específica.
Estos informes pueden ser utilizados para generar atención mediática y dañar la reputación de la marca objetivo.
Acciones legales: Se refiere a tomar acciones legales, como presentar denuncias ante organismos reguladores o demandas judiciales, para exponer prácticas comerciales cuestionables, fraudulentas o engañosas de la marca competidora.
Aunque puede ser efectivo para desacreditar a un competidor o para generar atención mediática, el antimarketing selectivo también conlleva riesgos, como posibles repercusiones legales, daño a la reputación propia y una percepción negativa por parte del público si se percibe como una táctica desleal o poco ética.